Rubio se va a México: "En Chile cuesta tomar riesgos"

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Tras lanzar su nuevo EP en el teatro Nescafé de las Artes, Francisca Straube se instalará en Norteamérica.


Conocida por su trabajo anterior junto a Fármacos y el extinto grupo Miss Garrison, seguido de un aplaudido proyecto de experimentación pop bajo el nombre de Rubio, Francisca Straube se ha ubicado como una de las más reconocidas representantes de la música alternativa en Chile. Eso hasta este semestre, porque la artista se irá del país para expandir su carrera en México.

"El mercado de Rubio es muy 'latin alternative'", dice sobre el concepto con el que se encasilla su propuesta en festivales extranjeros y listas de Spotify. "Y eso está en el área de México, Los Angeles, Nueva York y Chicago. Es el paso que tengo que dar", asegura la cantautora, quien ha actuado en festivales como el Lollapalooza chileno y el Primavera Sound de Barcelona.

Por estos días, Straube trabaja en segundo álbum, Mango negro, sucesor de Pez (2018). Un disco que lanzará en tres partes -el primer EP sale mañana con el título de La pérdida- y del que mostrará un adelanto en vivo este 22 de marzo en el teatro Nescafé de las Artes (entradas en Ticketek). La velada se convertirá en su despedida de Chile.

"A veces la vida te enfrenta y te pone a prueba, puedo estar muy cómoda en esta situación pero ahora vamos a pegarle un cambio, saldré de esa comodidad y voy a partir pseudo desde cero", comenta la solista, quien en los últimos meses estuvo de gira por países como Perú, Ecuador, Colombia y también Argentina, llenando el club Niceto de Buenos Aires.

Al momento de profundizar en los motivos de su autoexilio artístico, Straube comenta: "Para viajar a giras o festivales viviendo en Chile siempre hay una inversión, porque a Rubio la invitan a festivales pero a veces no pagan los pasajes. Estando al medio del mundo hay más factibilidad de que te paguen y posibilidad de movimiento", señala.

"Este es un paso para cambiar, rodearme de gente de otros países y culturas. Creo que en Chile cuesta tomar riesgos, pero también porque es chico y no hay tanto público, entonces se crea un círculo vicioso: como no hay tanta gente no se puede llenar un local y lo que está llenando acá es el trap, eso es lo que prende", cierra.

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