La desgarradora autobiografía que Marie Fredriksson publicó 6 meses antes de morir

¿Cómo resumir 60 años de vida en poco más de 200 páginas? Una pregunta difícil de contestar para cualquier ser humano, más cuando se trata de una cantante con una carrera virtuosa y una vida colmada de hitos trágicos.

Marie Fredriksson, cantante del dúo sueco Roxette, falleció la mañana de este martes 10 de diciembre tras casi dos décadas lidiando con un cáncer cerebral. Solo seis meses antes, Fredriksson había publicado una autobiografía co-escrita con la periodista Helena Von Zweigbergk, un libro que aludiendo a uno de sus mayores hits lleva por título Listen to my heart.

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Si bien se traduce al español como "Escucha a mi corazón", el título original es Kärleken till livet (Amor por la vida), una declaración literal del pensamiento que tenía para sobre llevar el día a día: superó cada golpe, cada tragedia y supo ponerse de pie cuando su salud comenzó a traicionarla.

Por medio de imágenes inéditas del archivo personal de la cantante, su propio testimonio y el de sus colegas, amigos, manager, familia y esposo; el libro humaniza a Marie retratando las alegrías y dolores de la mujer tras la potente voz de Roxette.

Marie, nacida en el pequeño pueblo de Össjo en Suecia en 1958, provenía de una familia de escasos recursos. Pasó su infancia en una población rural cerca del Mar Báltico, temiendo por los maltratos por parte de su padre alcohólico -Charles Gösta Fredriksson-.

Con una familia conformada por sus padres y cuatro hermanos mayores -Anna Lisa, Ulla Britt, Tina y Sven Arne-, crecieron aprendiendo a temprana edad a velar por sí mismos, y eran sus hermanos quienes cuidaban de Marie mientras sus padres trabajaban en la granja.

En 1962, la familia vendió la granja y se mudaron a  Östra Ljungby. Mientras su madre encontró trabajo en una fábrica a unos kilómetros de distancia de la casa, su padre se convirtió en cartero y se hizo cargo del cuidado de Marie llevándola consigo al trabajo. A pesar del vicio de su padre, fue él quien la indujo a cantar, ya que en cada jornada, repasaban diversas canciones que motivaran a su hija.

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De hecho, a los 8 años formó su primera banda con unos amigos del colegio, quienes usaban instrumentos falsos mientras versionaban canciones de la época como The Beatles, Rolling Stones o Led Zeppelin. Pero a esa misma edad, Marie sufrió uno de los golpes más duros de su vida: su hermana Anna-Lisa falleció a los 20 años en un accidente automovilístico en 1965.

De personalidad más bien tímida, sufrió bullying en el colegio, pero la música siempre fue su salvavidas. Durante una década en que las marchas estudiantiles, lucha por los derechos civiles y el movimiento hippie; Marie comenzó a componer sus propios temas.

El grueso de Listen to my heart está en la banda que la lanzó a la fama: Roxette.

Lo que comenzó con "The look" en 1986, continuó en 1989 con "Listen to your heart" y los catapultó a la fama definitivamente con "It must have been love". La aparición de esta última canción en la taquillera Pretty Woman, los tenía en los ránkings musicales en Estados Unidos y los posicionó como una de las bandas icono de los 80 si de power ballads se trata.

Desde la formación que unió a Marie con el cantante y compositor de la banda -Per Gessle-, pasando por los altos y bajos, y el posterior caos asociado a la fama; la autobiografía relata por medio de su protagonista femenina lo que implicaba ser una de las bandas del momento.

"Quiero que la gente sepa. Quiero contar qué supone pasar por lo que a mí me ha tocado pasar", escribió la artista en su libro, quien da a conocer roces con su compañero, y cómo se sintió cuando minimizaron su voz en cuanto a decisiones y al momento de grabar.

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Listen to my heart, la autobiografía de Marie Fredriksson, cantante de Roxette.[/caption]

El 11 de septiembre de 2002 marcó un antes y un después en la vida de Marie. En el baño de su casa en Djursholm, se resbaló y golpeó la cabeza fuertemente. Fue llevada de urgencia al hospital de Estocolmo, donde además de ser diagnosticada con una contusión, hallaron un tumor en su cerebro.

Si bien el tumor fue removido a fines de ese mismo septiembre, fue sometida a fuertes tratamientos de quimioterapia, los cuales afectaron su salud física y mental. Debía enfrentar un cáncer que amenazaba con quitarle la vida.

En paralelo, Marie siguió trabajando en su mayor pasión: la música. Tras su diagnóstico publicó cuatro discos solista -The Change, Min bäste vän, Tid för tystnad y Nu!-. Si bien en mayo de 2005 anunció que estaba libre del cáncer, la enfermedad realmente no la abandonó.

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Las fuertes dosis de radiación dañaron su cerebro a tal nivel que olvidó como hablar, leer o caminar. Necesitó ayuda para volver a ser ella misma, desde moverse sola, hasta memorizar nuevamente sus canciones.

En el libro también manifiesta su odio hacia la cortisona -usada en los tratamientos contra el cáncer- la cual desfiguró su cara y figura a tal nivel que no lograba reconocerse.

Pero, sin dejar de lado lo positivo de la vida, declara que su palabra favorita es "calma": "Calma es la palabra más bonita que conozco", dijo la cantante en su autobiografía. Tal como señalaba el título original del libro, Fredriksson declaró su amor por la vida y su goce de las cosas pequeñas.

Sin tapujos, la voz de "It must have been love" relata todo lo acontecido respecto a su enfermedad, incluyendo la falta de empatía de medios como The Expressen para hablar de su diagnóstico como quien vende papas fritas.

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Luego de casi dos décadas sometiéndose a los tratamientos de rigor para destruir lo que comenzó como un pequeño tumor, Marie Fredriksson falleció este martes 10 de diciembre, dejando un legado de canciones que marcaron la década de los 80.