Fallece Ricardo Mac Kellar, uno de los mayores coleccionistas de pintura chilena del siglo XIX y XX

Ricardo Mac Kellar en su casa de Quillota, un año después del robo de arte que sufrió en 2008. Foto: Archivo

En la madrugada de hoy, murió el filántropo, a los 92 años. En 2008 sufrió el robo de 30 óleos de su parcela de Quillota, que luego la policía logró recuperar casi en su integridad. Tras el incidente, decidió donar 150 obras a la Corporación Cultural Las Condes, las que se exhiben públicamente hasta hoy.


En septiembre de 2008, Ricardo Mac Kellar Jaraquemada ingresó de urgencia a la clínica, descompensado por el que había sido el robo de su vida: 30 cuadros, avaluados en $ 180 millones, de su valiosa colección de pintura chilena habían desaparecido de su parcela en Quillota. El pelusa e Incendio en el bosque de Pedro Lira, Flores Silvestres y Zarzamoras de Juan Francisco González, eran algunas de las pinturas que fueron saqueadas y que más tarde aparecieron, eso sí, con severos daños.

Mac Kellar se recuperó, pero el incidente le dejó para siempre la inquietud de resguardar mejor su colección. Cuatro años después, el coleccionista resolvió el problema haciendo una inédita donación de 150 pinturas de su acervo a la Corporación Cultural de Las Condes, institución que se comprometió no sólo a conservar la colección sino que a exhibirla permanentemente en la Casa Museo Santa Rosa de Apoquindo, donde hasta hoy cuelgan las obras que pueden ser contempladas de martes a domingo, de 10.30 a 19 horas, con entrada liberada.

La madruga de hoy, el filántropo y uno de los mayores expertos en la pintura chilena del siglo XIX y XX falleció de causas naturales. Tenía 92 años. Hace algunos años dejó su casa de Quillota y se había trasladado a Santiago, donde vivía en una residencia de descanso senior. "Hasta el última día recibió amigos que compartían con él y lo visitaban. La verdad es que además de un coleccionista de arte también lo era de amigos", comenta su sobrina Isabel Margarita Mac Kellar. Mañana, sábado 7, se oficiará una misa al mediodía en la Parroquia Transfiguración del Señor en Apoquindo, y sus restos descansarán en el Cementerio Católico.

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Cuadro El pelusa, de Pedro Lira, parte de la colección Mac Kellar.[/caption]

Devoto del arte

Desde pequeño, Mac Kellar vivió rodeado de pintura. Creció en una casona de tres patios (que ya fue derribada) en la calle Alvarez de Viña del Mar. Su abuela, Modesta Pinto D'Aguiar tenía orígenes portugueses, era pintora y había estudiado con el maestro Manuel Antonio Caro, autor de La zamacueca. Sus padres, Pedro Mac-Kellar y Berta Jaraquemada, comenzaron la colección de arte que él heredó e hizo crecer con vocación.

Mac Kellar se dedicó a la agricultura y al comercio. Nunca estudió arte, todo lo aprendió de forma autodidacta y en contacto directo con los cuadros, a los que dedicó su total atención, ya que nunca se casó ni tuvo descendencia.

A los 15 años, su padre le regaló su primera pintura: Bahía de Valparaíso de Juan Francisco González, óleo que también fue robado y vandalizado en 2008. Curiosamente fue el robo el que devolvió a Mac Kellar a la esfera pública, luego de haber ejercido como curador en algunas exposiciones en años anteriores, y que eventualmente lo llevaría a hacer la más importante donación de su vida. "Ya he vendido y donado cuadros, por ejemplo de Pedro Luna, al Museo de Bellas Artes y a la Pinacoteca de Concepción, pero lamentablemente el Museo de Bellas Artes no tiene suficiente espacio para colgar todo su patrimonio. Como no quiero que mi colección esté guardada, prefiero donarla a nuevos espacios. Tengo desconfianza del futuro y que mi colección salga a remate", explicaba en una entrevista con La Tercera, en 2009.

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Retrato de Inés Puyó, realizado por Pablo Vidor. Colección Mac Kellar de Pintura Chilena[/caption]

Desde 1943 sólo coleccionó arte chileno, siempre por instinto. Dentro del acervo que se resguarda en Las Condes, se cuentan obras de los maestros de la pintura del siglo XIX como Pedro Lira, Juan Francisco González, Arturo Gordon, Alberto Valenzuela Llanos y Alfredo Valenzuela Puelma. Pero también su gusto se extendió a generaciones más jóvenes como los miembros de la Generación del 13 (Exequiel Plaza y Pedro Luna), Henriette Petit, Ana Cortés, Pablo Vidor y contemporáneos como Ximena Cristi, Matilde Pérez, Nemesio Antúnez, Bororo, Carlos Leppe y Juan Luis Martínez. "Carlos Leppe es un gran artista conceptual, pero antes de él estuvo Juan Luis Martínez, quien en sus obras ponía hasta tierra de cementerio. Hacía poesía visual", decía en 2009

Luego de la donación que hizo en 2012, Mac Kellar se quedó sólo con cinco obras y repartió el resto de su acervo entre su familia y amigos. "He estado en la organización de muchas exposiciones, y sucede que uno se encuentra con gente que no quiere prestar, o la señora que no quiere que le quede el hueco en la muralla o el tipo que cobra cifras desproporcionadas por el uso de sus cuadros. Siempre lo he dicho: nosotros somos poseedores temporales de estas obras, pero ellas son parte del patrimonio nacional; o sea que tenemos la obligación de darlas a conocer y de que sean vistas por el público", dijo el coleccionista.

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