The Boys: malditos superhéroes

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The boys es una serie que combina acción, comedia negra y drama para dar una respuesta llena de cinismo -pero que se siente perfectamente posible- a la pregunta de qué pasaría si los superhéroes vivieran entre nosotros, en una sociedad que pone a sus ídolos en pedestales, les compra todo lo que venden y no quiere saber si son realmente buenos o malos.


Es una historia que se ha visto una y otra vez, aunque últimamente más en las noticias que en la ficción. Personas con demasiado poder, admiradas y protegidas, que usan sus recursos para salirse con la suya. Abusos de poder, crímenes y malas conductas por parte de gente que siempre consigue lo que quiere, al tiempo que mantiene una imagen pública intachable y es objeto de adoración de millones alrededor del mundo.

Esa es la base de The boys, la serie basada en un cómic del mismo nombre y que ya tiene sus primeros ocho capítulos disponibles en Amazon Prime.

Pero en esta historia los villanos encubiertos no son actores o empresarios multimillonarios: son superhéroes. Viven entre nosotros, firman autógrafos, se sacan selfies, atrapan ladrones y salvan a niños, al mismo tiempo que venden millones y millones de dólares en merchandising, son corruptos, egocéntricos y ansiosos de más fama y poder.

De todo esto se entera de la peor manera posible Hughie (Jack Quaid, hijo de Meg Ryan y Dennis Quaid), un joven normal, bueno para la computación y con un trabajo aburrido, que va caminando con su novia cuando ella es pulverizada por A-Train, el superhéroe más rápido del mundo. Éste último aparece después en televisión enviando sus condolencias y explicando que él no tuvo la culpa, que la chica estaba parada en la mitad de la calle, cosa que no es cierta. Es ahí cuando Hughie se compromete a revelar la verdadera historia, lo que hace que lo contacte Billy Butcher (Karl Urban), un tipo rudo, irónico y que odia a todos los superhéroes, y que liderará un grupo decidido a desenmascararlos.

Cerrando el puzzle de la historia aparece Annie (Erin Moriarty), una inocente superheroína que realmente quiere hacer el bien y salvar al mundo, y que cree que todos sus sueños se harán realidad cuando es invitada a formar parte de Los Siete, como se conoce al grupo que reúne a los más influyentes sobrehumanos. Pero rápidamente se dará cuenta de que la realidad es muy diferente.

Con todos estos elementos, The boys es una serie que combina acción, comedia negra y drama para dar una respuesta llena de cinismo -pero que se siente perfectamente posible- a la pregunta de qué pasaría si los superhéroes vivieran entre nosotros, en una sociedad que pone a sus ídolos en pedestales, les compra todo lo que venden y no quiere saber si son realmente buenos o malos. Todo esto, en medio de escenas de peleas donde abunda la sangre, conversaciones llenas de ironía e insultos y una buena banda sonora.

Sin duda, un buen giro a las historias de superhéroes, que los pone a ellos en el lado malo de la cancha y hace que la audiencia se ponga del lado de los flacuchentos, feos, incorrectos y posiblemente criminales que quieren luchar contra los más poderosos.

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