El Resplandor: la historia detrás de la escena del ascensor

el resplandor ascensor

La película de 1980 es considerada una de las cintas más importantes en la carrera de Stanley Kubrick. Dicho episodio provocó el nerviosismo total del cineasta, quien no quiso estar presente al momento de grabar.


Al igual que la aparición de las gemelas o el escape del pequeño Danny, los sucesos que involucran el episodio del ascensor ensangrentado no pasan desapercibido en este clásico del séptimo arte.

Y es que la secuencia en la que Shelley Duvall queda sin palabras ante el dantesco escenario generó tanta expectación que ni el propio Kubrick estuvo presente durante la filmación. Si nos remontamos a la época de rodaje, uno de los personajes claves detrás de la cinta fue Leon Vitali, asistente personal del cineasta quien en conversación con Yahoo retrató los días de filmación.

https://www.youtube.com/watch?v=ix18LpilLtY

"Pasamos semanas y semanas y semanas tratando de conseguir que la calidad y el color de la sangre fuera lo más natural posible", afirmó Vitali, quien tras el nerviosismo de Kubrick, fue el responsable de estar sentado en el puesto de director. "La consistencia era muy importante, porque estábamos vertiendo cientos de galones de sangre. Y luego, por supuesto, estaba la mecánica, porque si tienes tanta presión dentro de algo como un ascensor, va a explotar si no tienes cuidado".

Si analizamos con profundidad, la cámara se encuentra estática frente a la puerta del ascensor, la cual se abre lentamente mientras una ola de materia roja y pegajosa sale, arrasando con las paredes e incluso el objetivo de la cámara.

Fueron cuatro filmadoras las utilizadas para la grabación, cada una de ellas equipada a velocidades distintas. El trabajo de instalación fue rápido, ya que la hemoglobina no iba a mantenerse por mucho tiempo dentro del pequeño espacio. "El ascensor comenzaba a gotear antes de que las puertas se abrieran", recordó el leal asistente. "Creo que se alcanza a ver en la película; empieza a filtrarse ".

[caption id="attachment_73498" align="alignnone" width="700"]

Imágenes del set de filmación de El Resplandor.[/caption]

Este episodio no aparece como tal en el libro homónimo de Stephen King, más bien es una idea proveniente del cineasta junto a su co-escritora Diane Johnson, quienes quisieron convertir al Hotel Overlook en un personaje más. El costo de llenar el ascensor con el líquido era un riesgo monetariamente hablando, siendo una idea a la que el director no quiso renunciar.

Leon Vitali destaca que Kubrick no sufría de hemofobia pero de todas formas el fracaso no era una opción en ese momento: "Cuando todos estábamos en el set, Stanley dijo: 'Vigílalo y dime si algo sale mal'... ¡Y luego se fue!". Tras el éxito de la toma, el diluvio de sangre provocó la alegría de todo el set, incluso del nervioso artista. El logro de la escena fue tal, que Warner Brothers la seleccionó para ser parte del tráiler oficial.

https://www.youtube.com/watch?v=HEew7zvpAWE

La expresión esquizofrénica del norteamericano logró transmitir el horror a sus espectadores, manteniéndose como una de las mejores cintas de terror de todos los tiempos.

Redrum... Redrum... Redrum.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.