Arnaldo Alarcón, el talento secreto de la fotografía chilena

147-820x385

Entre los años 50 y 80, el fotógrafo aficionado registró la vida cotidiana de la zona austral del país. En el desván de su casa en Punta Arenas guardaba más de dos mil negativos. A los 89 años, Alarcón muestra parte de su obra inédita en Matucana 100.


Cuando se trata de su obra fotográfica, Arnaldo Alarcón (1928) recuerda las palabras que la poeta Gabriela Mistral escribió en su Decálogo: "De toda creación saldrás con vergüenza, porque fue inferior a tus sueños". "La fotografía siempre fue valiosa para mí, pero no valiosas por ser un fotógrafo extraordinario, sino porque era mi hobby y siempre hay un rincón donde seguir buscando con inquietud", agrega él, por teléfono desde su casa en Punta Arenas.

A los 25 años, Arnaldo Alarcón se colgó la cámara al cuello y no se la sacó más. Su carrera de fotógrafo aficionado o, como dice él, "su inquietud" la cultivó hasta convertirla en un hobby permanente. Uno que mantiene actualmente en formato digital y que desarrolló con fervor de manera análoga hasta los años 80. Hoy, con 89 años, una pequeña parte de su extensa obra visual forma parte del programa Traslado, la última muestra de artes visuales que impulsó el Consejo Nacional de la Cultura.

[caption id="attachment_5654" align="aligncenter" width="617"]

Punta Arenas bajo la nieve, aproximadamente 1958.[/caption]

Por su trabajo como tasador fiscal en Impuestos Internos durante la década de 1950, el fotógrafo autodidacta oriundo de Chillán viajó por la zona austral del país. Con residencia definitiva en Punta Arenas, se trasladó constantemente entre ciudades y pueblos de la región, a menudo aislados, y disparó el obturador de su cámara a todo aquello que llamara su atención. "Me sentaba con mi máquina y disparaba lo que me parecía", recuerda.

Paisajes y niños fueron su principal motivo fotográfico, pero eso no lo limitaba. Entre sus registros se puede advertir la vida y costumbres de la zona, la geografía, el trabajo, los juegos y la vida cotidiana. Su amplio archivo visual repasa la historia de ese sector del país durante tres décadas, entre los años 50 y 80. Lugar por el que pasaba le dejaba uno que otro negativo que, hasta mediados del año pasado, estuvieron olvidados en un desván.

[caption id="attachment_5655" align="aligncenter" width="615"]

Alarcón retrató también los oficios de la zona austral.[/caption]

Restauración

Desde 1980 hasta 2013, Arnaldo Alarcón trabajó como gerente administrador del Hotel Los Navegantes en Punta Arenas. Este rubro lo puso en contacto más directo con la naturaleza y lo convirtió en un promotor del ámbito turístico en Magallanes. Cuando jubiló, su inquietud fotográfica seguía tan latente como en su juventud, así que decidió tomar clases de fotografía digital con el fotógrafo Vicente González Mimica.

"Sabía que era fotógrafo, pero quedaba hasta ahí no más, como si fuera un mito urbano", comenta González Mimica. En una ocasión el fotógrafo digital le pidió ver su trabajo de décadas pasadas y eso no sucedió hasta mediados de 2016, cuando Arnaldo Alarcón hizo aseo en el desván de su casa y encontró sus negativos. "No pensé que tenía esa mirada, muy relacionada con el trabajo de Antonio Quintana en algunas tomas, muy europeas" agrega.

[caption id="attachment_5656" align="aligncenter" width="618"]

Patinajes sobre hielo en Magallanes a fines de los 50.[/caption]

"Le pregunté cómo se le ocurrió tomarlas y él sólo lo hacía, sin referentes. Nunca fue una persona que intentara seguir una corriente, tampoco era algo comercial, siempre fue autodidacta… él es una suerte de Vivian Maier (N.de la R.: fotógrafa americana cuya obra fue descubierta tras su muerte) y es una joya encontrar este material y a él vivo", dice Vicente González.

El proceso de recuperación y restauración, que han trabajado Arnaldo Alarcón y su profesor de fotografía, ha dado como fruto encontrar cerca de dos mil negativos y diapositivas en color. Ya han logrado escanear alrededor de 200 imágenes, que son las que González Mimica ha podido editar rápidamente.

[caption id="attachment_5659" align="aligncenter" width="640"]

"Me sentaba con mi máquina y disparaba lo que me parecía", dice el autor.[/caption]

La mirada de Arnaldo Alarcón sale ahora por primera vez de la región: 10 fotografías de 100×100 cms, seleccionadas por las curatorías regionales que se realizaron durante el 2016 por el Programa Traslado, pueden verse actualmente sobre un muro blanco en el Centro Cultural Matucana 100.

La exposición, que además reúne el trabajo artístico de 65 creadores nacionales, se puede visitar hasta el 28 de abril de manera gratuita. Entre martes y miércoles de 12.00 a 18.00 horas, y de jueves a domingo hasta las 21.

"Sin duda, la fotografía es escribir la historia de la ciudad y las personas, es un documento muy valioso", responde Arnaldo Alarcón sobre la idea de que sus fotografías sean vistas por más personas. "Vamos a continuar, la idea es seguir haciendo cosas y buscando carpetas, siempre hay cosas por hacer", agrega.

Para Vicente González, quien divulgó enérgicamente las fotos de Arnaldo por la región y las propuso a los curadores de Traslado, el siguiente paso es lograr hacer una exposición personal y publicar un libro.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.